El amor no tiene sexo
Me acuerdo cuando eramos dos. Tú y yo, Angel. Me decías cada mañana que no me amabas, lo deciás así, seguro de ti, con certeza, sin dudarlo: No te quiero, y te ibas sin decirme donde, pero yo me iba contento al despacho porque sabía que estarías allí por la tarde para repetirme que no me querías... El día que me dejastes me dijiste con seguridad y rotundidad que lo hacias por que me amabas...
0 comentarios